
La soledad que algunas veces rodea nuestras vidas, no es más que una ilusión que Dios ha creado para elevar nuestro nivel de esperanza, pues realmente nunca hemos estado solos. Más sin embargo...
Si alguna vez caes y sientes en ese instante, que necesitas una mano que pueda ayudarte o una voz - que pueda recordarte lo mucho que vales...prometido.
Si alguna vez tu vida es tan perfecta que te olvidas del mundo y luego empiezas a darte cuenta que no hay nada que logre motivarte, pues crees tenerlo todo...prometido.
Si alguna vez decides dedicar la mayor parte de tu vida sólo a ponerte bella físicamente, más no lo haces de igual forma por cultivar tu espiritualidad o tu intelecto...prometido.
Si alguna vez olvidas tus orígenes y te pierdes en un ambiente que te lleva como la corriente de un río, dejando en las orillas tu verdadera forma de ser...prometido.
Si alguna vez sientes que la vida juega contigo - las cosas se salen de control, necesitando algo de paz y tranquilidad...prometido.
Si alguna vez tus sueños no parecen hacerse realidad, aún cuando buscas con todas tus fuerzas y lo intentas una y otra vez...prometido.
Si alguna vez te roban el aliento y se apoderan de tu corazón, para luego dejarlo a un lado del camino y quedarte en la oscuridad...prometido.
Si alguna vez alguna canción te transporta a un momento especial de tu vida, recordando de inmediato que sería difícil volver a ese espacio...prometido.
Si alguna vez tu alma pareciera querer salir de ese cuerpo en el cual está anclada, pues sigue siendo más aventurera y soñadora que la misma realidad...prometido.
Si alguna vez pierdes la pasión por vivir, por disfrutar cada día, por sentir...prometido.
Prometido...que ahí estaré, prometido que jamás me iré...y prometido ante Dios que así será.