Sunday, April 22, 2007

Al Copetes...


Llegamos puntualmente a una esquina en donde había una casa vieja, sin techo y bastante despintada. Realmente tenía la apariencia de un terreno abandonado para drogadictos y personas sin hogar, pero la pintura con algunos de los personajes famosos y la cartelera hecha en papel periódico y con marcador azul y rojo, indicaba que el ambiente estaba vivo y mucho más de lo que yo creía.
Al ingresar el ambiente estaba lleno de gente, pero lo más sorprendente de familias con niños de todas las edades, personas mayores de 70 años y algunos infantes de apenas 3 años. Todos con una extraña luz en los ojos, con una ilusión de ver el espectáculo que estaba por iniciar.
Al empezar la primera lucha, la multitud empezó a calentarse: “Pégale como cuando te dan verga por andar robando”, decía la esposa de Neto mientras El Gallo le pegaba a su marido…en su regazo se encontraba un niño de unos 8 años, mientras ella podría tener unos 26 años. Envió a su niño a comprar café caliente, pues el hermano del Gallo le había echado café caliente a Neto y quería vengarse. Ella misma tomó el café caliente y se lo echó en la espalda a El Gallo. Incluso su niño mayor de unos 11 años llevó a cabo el mismo acto y le volvió a dar de la misma medicina unos minutos después, impulsado por su madre.
En ese momento, de nuevo gritan desde la otra gradería: “Viejo cerote anda a acostarte. A tu mami se la ha pizado mi marido, culero – que significa homosexual en lenguaje callejero-” repetía nuevamente la esposa de Neto…mientras le apaleaban a su esposo, en una escena que aún cuando tiene mucho de teatro, está cargada de realidad, intensidad y desenfreno. La famosa Arena Gloria, que lleva el nombre de su dueña, una mujer que es parte del espectáculo, es la que cobra y la anima todo le evento…tendrá unos 45 años y fue peleadora de lucha libre en su juventud.
El famoso Al Copetes salió en la última de la noche, la estelar y que en esta ocasión era de lucha entre parejas. En la cartelera decía textualmente: Al Copetes y Diabolick vrs Yoly y Rudy...y se anotaba un mensaje de la primera pareja: “Estos o estas no saben lo que se les ha preparado, a estos dos se los va a llevar el diablo”.
El famoso Al Copetes había salido hacía cuatro semanas en un reportaje a nivel nacional, en donde se mencionaba su larga carrera y que con más de 60 años aún seguía dando de qué hablar en la arena…y era precisamente lo que estaba a punto de presenciar.
Al Copetes iniciaba la pelea con la energía de un joven de 20 años, incluso contra el que peleaba y que es ahora el nuevo esposo de Gloria. Alguna vez le dijo a su familia, que moriría en la arena pues no pensaba dejar de pelear, pero ya a su edad y con un padecimiento del corazón…su frase no parecía ser un comentario, sino algo muy real.
El diablo era el juez en todas las peleas, en su juventud fue peleador y ahora es la parte cómica de las peleas, pues al tardarse para dar un ganador que no es su favorito, dice que tiene un problema en sus manos por la edad y que no pudo contar hasta tres. Por otro lado, si es el de su parte el que va ganando, ese tiempo se convierte en apenas un segundo…provocando la furia de algunos y las risas de muchos otros. En este caso, Al Copetes peleaba contra Yoly, que es un travesti que divierte a chicos y grandes, pues cuando tiene a sus oponentes movilizados, los acaricia y les hace pesadas bromas, lo cual realmente hace reír a todos.
Pero en este caso, Al Copetes empezó a pelear con ambos y en un momento tomó una piedra para golpearlos, detalle que se revirtió como parte del espectáculo, pero con la variante que debido a la salud de Al Copetes, en un momento empezó a moverse de manera extraña y cayó al suelo pidiendo ayuda. Su pulso temblaba y hasta su familia se dio cuenta que algo extraño estaba pasando. Al ser la última pelea y además, ser parte del cierre…se convirtió en un cierre inesperado y que le encantó a los fanáticos, pero alrededor de 20 minutos duró el famoso peleador en estar recuperado para poder volver a su casa.
Por algunos minutos, estos hombres y mujeres se convierten en héroes de sus barrios y logran descargar toda la furia y el estrés que se acumula en la semana.
En realidad Al Copetes, es mucho más que un vendedor del mercado, es un luchador que ha dado su sangre y esfuerzo por divertir a mucha gente, arriesgando su vida…pero entregando su alma en cada domingo…y enseñando tanto acerca de la vida con cada gota de sudor que derrama sobre el duro suelo.

1 comment:

melissa said...

Que bonita experienza
Gera escribes excelente mientras leía por un momento me traslade...nos llevas en el viaje.