Monday, August 13, 2007

Puerto Viejo




Ese lugar donde se llena el alma de energías nuevas, ese donde la gente camina no necesita galas reales para ser importante, donde nadie teme decir lo que piensa o hacer lo que se antoje, ese mismo donde nadie debe aparentar lo que no es.
La tierra de la sinceridad, donde los espíritus que te acechan no pueden entrar y te dejan gozar de la música, la sabrosa cocina caribeña y hasta del hermoso paisaje, que aparente estar congelado en el tiempo.
El desarrollo no ha robado aún la magia de la zona, pero el lugar podría haber cerrado las heridas de un corazón.
La marea no golpea fuerte en Puerto Viejo, mucho menos en Manzanillo, pero sí arrastra muchos recuerdos que me hacen saltar de emoción en una fiesta de recuerdos.
Los locales no intentan cambiar lo que son y han sido, pero yo daría lo que fuera por tener esa sonrisa a mi lado, para sanar su corazón y ver la luz de sus ojos iluminar el camino.

1 comment:

Lucrecia said...

Debe ser un lugar hermoso...