Monday, February 20, 2006

Como en un desierto…en esta sala...

En esta sala ahora comen, hablan y se entretienen al menos 50 personas, al frente desfilan cientos más con sus maletas...

En esta sala que parece un desierto, me siento a pensarte y todo lo demás se desvanece, en esta sala en que todo ser humano ha desaparecido, de nuevo se ha llenado, esta vez de ti...

En esta sala escucho mi corazón latir más rápido al imaginar que en unas 3 horas escucharé tu voz, aún cuando posiblemente no sea posible verte...

En esta sala en la que las víboras, liebres, lagartijas y demás insectos no habitan, pero que aún así asemeja a un desierto, te imagino a la distancia como un oasis, ese que podría calmar mi ansiedad, ese que podría frenar esta carrera de la vida, ese que podría apaciguar el ruido que está a mi alrededor...

En esta sala en la que me siento, te pienso y te siento, no queda más que pedirle a Dios que me permita conocerte, que me permita saber si realmente eres quien soñé, saber si tu alma y la mía, podrían empezar a caminar juntas, sin querer una poseer o sentirse dueña de la otra...

En esta sala de espera, de este lugar en el que salen diariamente muchos pájaros de gran tamaño cargados de sueños, anhelos, temores, metas, placeres y sobre todo gente que espera llegar al lugar que siempre estará tatuado en tu corazón, su hogar...ahora te extraño...

En esta misma sala me he encontrado con un roble, uno que tiene raíces, tiene descendencia, uno que me ha hablado de su familia, de su vida, de su trabajo...uno que me ha hecho soñar con esa criatura que espera por tu regreso, ese que lleva tu misma sangre, ese que al día de hoy no tengo el placer de abrazar...

En esta misma sala, te escribo, en esta misma te pienso, en esta misma he tratado de gritarte, sentirte y sobre todo empezar a conocerte...pero la distancia no me deja, sobre todo aquella que has ubicado, aquella barrera que aún no comprendo el por qué nos ha mantenido a la distancia, aún más lejos que desde este desierto desde el cual te escribo...una simple tarde de sábado...

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